
Al pie de las lagunas de Mojanda
Regresé a Quito con el espíritu agradecido luego de admirar las maravillas estimulantes que nos brinda nuestra naturaleza, bellezas que se despliegan ante nosotros como un gran abanico. Esa sensación la siento adherida a mi piel toda vez que el agobio y el vértigo citadino se evaporaron en el camino. Esta...