La decisión del presidente Guillermo Lasso de acudir a Israel en busca de asesoramiento, tecnología y recursos israelíes para combatir la inseguridad provocada por la delincuencia común y organizada en el país, genera cuestionamientos. En la agenda principal del viaje presidencial se contempla actualizar los convenios de cooperación con el Gobierno de Israel en materia de seguridad e inteligencia como uno de los objetivos del presidente Lasso, en su viaje a esa nación, en la que permanecerá hasta este 14 de mayo. El mandatario expresó su interés de tener apoyo bilateral para fortalecer los “elementos de inteligencia y de información para prever hechos que eviten pérdidas de seres humanos”
Según reconocen autoridades israelíes, la seguridad e inteleIigencia de ese país en un escenario de lucha antiterrorista está desde los inicios del Estado de Israel (1948), bajo responsabilidad de la organización llamada Mossad. Se trata de una de las agencias de inteligencia de Israel, responsable de la recopilación de información de inteligencia, acción encubierta y espionaje a escala mundial. La organización estatal israelí se ocupa de identificar y eliminar enemigos políticos, planificar y ejecutar asesinatos de militantes palestinos y generar y llevar a cabo acciones de terrorismo y contraterrorismo en todo el mundo. Se ha ganado desde hace mucho la fama de una agencia de inteligencia de suma eficacia; entre sus operativos más sonados, se encuentran obtención de planos secretos, ubicación de criminales de guerra nazis en América, liberación de rehenes israelíes, ejecuciones a islámicos, captura de agentes, obtención de información clasificada, acopio de productos bélicos estratégicos, entre otras operaciones.
La Mossad fue creada en 1949 como Instituto Central para la Coordinación de todos los servicios de seguridad, el Departamento de Inteligencia del Ejército, el Servicio Interno de Seguridad y el Departamento Político del Ministerio de Asuntos Exteriores. En 1951 fue reorganizado como un servicio civil dependiente del Primer Ministro de Israel con sede en Tel Avid, y cuenta con ocho departamentos, entre los que destaca el Departamento de Recolección de Información, que se encargaría de gestionar los espías en el extranjero. El Departamento de Acción Política y Enlace, responsable de trabajar con servicios de inteligencia aliados y agencias estadounidenses. Departamento de Investigación, dedicado a la producción de Inteligencia, y el Departamento de Tecnología que se encarga del desarrollo de aparatos que ayuden en las misiones de la Mossad.
¿Qué motiva al Gobierno ecuatoriano solicitar asesoramiento y tecnología a un organismo israelita como la Mossad? Tal vez exista una razón lógica, en coincidencia de criterios al concebir el problema de la delincuencia como un tema bélico. Lasso ha dicho “estamos en una guerra no convencional con la delincuencia”. Es decir, un asunto cuya solución pasa por acciones de inteligencia, investigación, represión y encarcelamiento. El régimen no alcanza a concebir que la delincuencia se vincula a problemas económicos no resueltos, que condena a la mayoría de la población a la pobreza por falta de empleo adecuado, lo que obliga a la obtención de dinero rápido y fácil y, por tanto, ilegal.
Existe un riesgo adicional en la influencia de organismos de inteligencia israelitas en Ecuador. El país se alinea automáticamente a la geoestrategia de occidente, específicamente diseñada por la inteligencia estadounidense-israelí en contra de sus enemigos civilizatorios islámicos. Este alistamiento contradice la posición de no alineado que debe primar en la geopolítica latinoamericana en el contexto de conflictos internacionales, más aún, cuando no resulta coherente con lo que el propio gobierno ecuatoriano ha proclamado de “más mundo en Ecuador”. El solo alineamiento restringe esa posibilidad porque segmenta a sus aliados, privilegiando a unos sobre otros. Y lo que es más contradictorio, el alineamiento menoscaba la posición de soberanía que debe primar en la conducta de un Estado autónomo en el contexto de un mundo multilateral.