El candidato presidencial Guillermo Lasso, del derechista movimiento CREO, se echó para atrás, rompió el romance y rectificó su postura sobre “un proceso de recuento de votos” que había acordado con el aspirante indigenista Yaku Pérez, e instó al CNE a proclamar los resultados, que hasta ahora le dan una leve ventaja para acceder a la segunda vuelta.
En una carta nada romántica puso fin al coqueteo electoral con Yaku y reconsideró el acuerdo en el sentido de que se debería incluir a los demás candidatos. Sin acuerdos no hay paraíso. En dicho acuerdo se había establecido que el CNE debería elaborar un instructivo para la revisión contable de votos y luego se proclamaría los resultados. Pero el candidato banquero sacó las cuentas y le recordó al CNE que la revisión de votos solo puede darse si todos los candidatos participan y lo aceptan.
Seguramente escuchó a sus asesores y prefirió curarse en salud, e insinuar que para revisar los votos se debe recibir primero la identificación de las urnas en las que se reclama el recuento y precisar específicamente la impugnación. “Si el CNE procede de otra manera, no solo sería injusto, sino ilegal y hasta delictivo, porque se presumiría la comisión de uno o varios delitos” y podría declararse la nulidad de todo el proceso, añadió.
También en la carta señala que, como ciudadano, aceptó el recuento de toda la votación en la provincia de Guayas, donde dijo que Pérez tenía sus mayores sospechas de un fraude en su contra. Y en un intento por sumar partidarios a su causa remarcó que «si hubiere un consenso entre todos los candidatos presidenciales inscritos, la mayoría con votaciones inferiores al 2 por ciento, aceptaría también el recuento de la mitad de votos en solo seis provincias”.
Yaku, despechado por la abrupta ruptura, respondió en Twitter: “¿Por qué se echa para atrás en el recuento de votos?¿Qué hizo usted y el CNE que no quieren que sepa el Ecuador? Para usted la política es un juego, para mí es la oportunidad de cambiar la vida de millones de ecuatorianos. Abrir las urnas es defender la democracia”.
Evidente, en el sucio juego de la política, que juegan a perdedores los políticos, todo puede suceder. Hasta un romance carnavalesco de fin de semana. Y Yaku lo deja en evidencia: ”Señor Lasso, usted no es el mismo del 2017, porque durante los últimos 4 años ha cogobernado con el peor gobierno, el de Moreno. Por eso no tiene ninguna oportunidad de triunfar si llega a la segunda vuelta”, electoral, añadió el candidato indígena.