En el lenguaje hípico se dice que los competidores entran en “tierra derecha” cuando ingresan a la recta final camino a la meta. Lo mismo ocurre con la campaña de persecución montada para eliminar la participación electoral del correísmo que muestra el alboroto final de los concurrentes. Esta semana tres eventos coincidencialmente dan cuenta de que estaría en marcha un fraude electoral para dejar sin lugar a participación a la candidatura de la lista de Centro Democrático. La puesta en escena se verifica en tres frentes, el judicial, el electoral y el mediático, que esta semana que concluye coincidieron en acelerar procedimientos como en la recta final de una carrera ecuestre.
En lo judicial, el proceso a Paola Pabón, por supuesta rebelión, en audiencia del día lunes pasado muestra irregularidades evidentes que violentan el debido proceso, principios democráticos y derechos de la afectada, según denuncia Pabón en su cuenta de Twitter. La Defensoría del Pueblo expresó su preocupación por la violencia política expresada en contra de la Prefecta de Pichincha y el uso excesivo de la prisión preventiva. Paola Pabón está bajo medidas sustitutivas a la prisión preventiva, luego de que estuvo privada de su libertad. El fiscal Alberto Santillán solicitó en esa audiencia un cambio de las medidas sustitutivas, nuevamente, por prisión, ante una supuesta alerta de la policía que indicaría que Pabón intentó asilarse en la embajada de México. Pabón negó su intención de buscar refugio diplomático y señaló que el fiscal pretende modificar la medida sustitutiva con informes forjados. La embajada mexicana indicó que no ha recibido ninguna solicitud de asilo por parte de algún ciudadano ecuatoriano. Felipe Rodriguez, abogado penalista, explica que la petición del fiscal es “errónea” porqué: “pese a que no le tengo mucha simpatía a Paola Pabón, porque tenemos diferencias, pero como ser humano tiene derecho a un debido proceso. Creo que se les ha ido la mano con este caso”. Rodriguez sostiene que es pertinente cambiar las medidas cautelares a una persona, única y exclusivamente, cuando se han incumplido las medidas sustitutivas, por ejemplo, si existe un informe que demuestre que cruzó la frontera y se fugó, cuando tiene que presentarse dos veces por semana y no se presentó, o si manipuló el grillete electrónico para quitárselo. “Si es que Pabón ha dado cumplimiento a todas las medidas sustitutivas, no le pueden cambiar las medidas. Ese es un derecho que tiene ella y que tenemos todos los seres humanos”, señaló el abogado.
En el mismo ámbito penal, el juicio que se sigue en contra del ex presidente Rafael Correa, varios miembros de su gobierno y empresarios en el caso Sobornos, el viernes cumplió la audiencia de casación con la intervención de Rafael Correa vía telemática. El ex presidente señaló que “es una persecución política y por perseguirme a mí están destruyendo gente inocente (…) se ha demostrado que existió fraude procesal, contubernio entre el juez León y la Fiscalía (…) los presos deberían ser ellos (…) cambiaron la acusación porque no tienen pruebas y ahora resulta que soy autor mediato porque ejercí influjo síquico”. La Fiscal, Diana Salazar, en tono descompuesto e insistiendo ante la prensa en que se niegue la casación, dijo que Correa no negó el delito, como reiterativa insistencia del argumento de la Fiscalía.
En el ambiente electoral, esta semana hubo novedades. Rafael Correa aceptó vía telemática su candidatura a la Vicepresidencia en binomio con Andrés Arauz por la coalición UNES con apoyo de Centro Democrático y Fuerza Compromiso Social. No obstante, que el candidato presentó un poder otorgado a su apoderada Pierina Correa, su hermana, el CNE negó su aceptación alegando que debe ser “personalísima”, es decir, presencial o física. Correa lo hizo en forma presencial vía telemática por encontrarse en Bélgica en cuarentena por la pandemia. Ante esta circunstancia, trascendió que el CNE advirtió que si la candidatura del binomio de Andrés Arauz no cumple con todos los pasos del proceso, etapa de selección interna primaria de los candidatos, presentación física de los postulantes para aceptar su candidatura, etc., no dará paso a la aceptación oficial de la lista que representa, cuando el 18 de septiembre se cumpla la fecha del plazo para el trámite.
En el ámbito mediático, este viernes el canal Ecuavisa puso al aire una entrevista al candidato Andrés Arauz en la que el entrevistador, Lenin Artieda, buscó descalificar a su entrevistado con ataques disfrazados de preguntas afirmativas y tendenciosas en un cuestionario que se convirtió en un round de dimes y diretes. Artieda interrumpió varias veces al entrevistado para obstruir sus argumentos y respuestas y cuestionó a Arauz una carta referida al FMI cuestionando los préstamos a Ecuador. El FMI quiere endeudar al país en 6 mil millones adicionales, mientras que Arauz se refirió a que existen 30 mil millones de dólares fuera del Ecuador que deben ser repatriados, porque sí hay recursos para la reactivación económica. Artieda con evidente intención dijo que si ese dinero sería para hacer obras con sobreprecio que era “la marca registrada” del gobierno de Rafael Correa. Arauz respondió que “no sé si puede darme un caso con alguna obra con sobreprecio documentada judicialmente, más allá del puro show del discurso que sabemos”. Y dejó en claro que “el gobierno de Moreno sí se ha endeudado, no ha hecho ni una obra y ha salido toda esa plata del país”. Arauz replicó que hablan de sobrendeudamiento sin pruebas judiciales, montan shows con actores de persecución política y con un Contralor sin nombramiento. “Los informes de contraloría están ahí, -dijo- sabemos que la Contraloría ha sido un instrumento de persecución política, con un contralor que no tiene ni nombramiento y está asumiendo una posición de forma fáctica, sin tener los documentos habilitantes del caso”.
Estos tres actos -judicial, electoral y mediático- hablan de un solo escenario de retaliación a los representantes de la lista presidencial que encabeza Andrés Arauz, denunciado por voceros de su candidatura. Sea por temor a su eventual triunfo electoral, sea por la mórbida obsesión de destruir la democracia formal y convertirla en pura representación simulada, bajo persecución política que ha demostrado ser la marca registrada de este gobierno.
Entrevista de Ecuavisa a Andrés Arauz