El periodismo suele ser el oficio que mayormente expuesto está a la crítica ciudadana. Precisamente, porque en una sociedad democrática constituye un vehículo de expresión de la ciudadanía, sin el cual ésta no tiene voz, ni la menor posibilidad de expresar y hacer sentir sus necesidades, inquietudes, críticas y cuestionamientos al poder establecido.
Más aun en Chile, país en el cual el poder está siendo frontalmente cuestionado por la sociedad civil y que requiere de un periodismo en disposición y capacidad de canalizar los cuestionamientos sociales a las esferas del poder, del gobierno y sus representantes. Pero, muy por el contrario, el periodismo en Chile es una actividad vergonzante cuando se trata del canal estatal TVN Chile que como medio “oficial” confunde el periodismo con las relaciones públicas, convirtiéndose en amplificador y difusor de las posturas políticas del cuestionado régimen de Sebastián Piñera.
Esto confirma lo sucedido durante una entrevista del periodista Matías del Río, rostro simbólico de TVN, al presidente chileno Sebastian Piñera en el programa Estado Nacional, del canal estatal Televisión Nacional de Chile. Según opinión masiva de los televidentes, el entrevistador tuvo una actitud obsecuente con el primer mandatario a quien dejó explayarse en temas de su interés, sin siquiera transmitir las inquietudes ciudadanas en sus preguntas. “Lamebotas fascista”, fue el epíteto que Matías del Rio recibió en redes sociales que, de manera masiva, expresaron su rechazo a la actitud condescendiente del reportero con su entrevistado. La actriz Nathalie Nicloux, ex integrate de “El club de la Comedia” escribió en Twitter: “Me puse a seguir a Matías del Río sólo con la esperanza de que vea este tuit que dice Anda a lavarte la raja (SIC), lame botas, fascista”, comenzó la artista.
Las críticas subida de tono contra el periodista oficial incluyeron expresiones como esta: «Matías del Río va a tener que hacer gárgaras con salmuera después de meterse el pene de Piñera hasta la garganta”. En otros tuits se leyó: “De Matías del Río uno no espera periodismo, su carrera ha sido meteórica precisamente por hacer relaciones públicas, no periodismo».
Otro punto cuestionado es que el moderador de la entrevista no contra preguntó para pedirle más datos a Piñera cuando el mandatario aseguró que en esta crisis social “se han intentado quemar hospitales e iglesias con gente adentro”, algo que el presidente ha repetido en variadas ocasiones, sin detallar los casos. “Hay mentiras que no se pueden permitir. No se han quemado iglesias con familias adentro y no se han quemado con enfermos en su interior”, lanzó una tuitera al momento de esta interacción.
El periodista de TVN se transformó en tendencia por las reprobaciones y los memes en su contra: matiasdelrio no le contra preguntó a @sebastianpinera por esta irresponsable mentira, se le olvidó el código deontológico del periodista, se leyó en redes sociales.
Matias del Rio se gradúa de chupamedias profesional. Qué pequeño queda frente a otros colegas. Qué triste papel está ejerciendo. Es tan deprimente cuando alguien queda convertido en una caricatura unidimensional a la que se le ve la costura, se pudo leer en Twitter. “Se terminó la entrevista. Estuve esperando las propuestas y mensajes sobre las causas de la crisis. Nada. Ni una pregunta y ninguna respuesta sobre los temas de fondo. Decepcionante entrevista”, concluyó un tuitero.
Lo sucedido en Chile en el canal de televisión estatal se ha convertido en la tónica del periodismo practicado por los medios públicos que, amparados en posturas obsecuentes con el poder, constituyen la caja de resonancia de las mentiras oficiales. Es la tónica de un periodismo pusilánime que no cuestiona al poder porque vive de él, se nutre de sus campañas políticas y publicitarias. Un periodismo entregado que se alimenta de los recursos públicos para defender los intereses de un Estado que se pone cada día de espaldas a la ciudadanía. Periodismo vergonzante.