El gobierno ecuatoriano decidió buscar una salida militar a la crisis social que vive el país, decretando dentro del “estado de excepción» el toque de queda y entregando a las FF.AA. el control del territorio nacional con militarización total de la ciudad de Quito. La decisión fue adoptada por el presidente Lenin Moreno luego de una jornada sabatina caracterizada por un recrudecimiento de las protestas del movimiento indígena organizado en la CONAIE y sectores populares de diversas procedencias.
Un hecho paradójico se ha producido en la trama de los acontecimientos en las últimas horas. El gobierno llama a un diálogo por un lado, y por otro intensifica las medidas de fuerza con un despliegue represivo sin precedentes en la historia republicana del país.
En medio del caos citadino, los manifestantes avanzaron hasta sitios estratégicos de la capital produciéndose violentos enfrentamientos con la policía antimotines y efectivos del ejército que respondieron con operativos represivos de notable intensidad. El resultado fue un saldo indeterminado de heridos y muertos que no han sido oficialmente confirmados y el incendio de oficinas públicas como la Contraloría General del Estado que registró importantes daños estructurales y la quema de un par de vehículos que se encontraban en los parqueaderos de las instalaciones de la cadena de televisión Teleamazonas en Quito. Ambos hechos están bajo sospecha de ser auto atentados, según versión difundida en redes sociales.
En fugaces cadenas nacionales de televisión, el gobierno fue marcando la pauta de una comunicación contaminada de propaganda y dichas en un tono de bandos militares. En sus intervenciones Moreno reiteró un llamado al diálogo con los indígenas, situación que no ha ocurrido, puesto que el Presidente se encuentra en la ciudad de Guayaquil y la dirigencia indígena está a la cabeza del paro en Quito. El primer mandatario anunció la vigencia del “toque de queda” en Quito y argumentó la versión oficial de los hechos, culpando a representantes del gobierno de Rafael Correa de un contubernio golpista coordinado desde Venezuela. En horas de la tarde de día sábado en cadena nacional de televisión miembros del Comando Conjunto de las FF.AA. leyeron un comunicado que indicaba en su esencia que la “restricción de movilidad en áreas sensibles y de importancia estratégica” se extiende a todo el territorio nacional. Los militares podrán efectuar acciones de control en espacios públicos, lugares de asociación y reunión, registro de personas y vehículos y en caso de actos de violencia se procederá a la aprehensión de los responsables.
Reacciones
Las medidas castrenses adoptadas por el gobierno generan diversas reacciones. Una encuesta de Cedatos realizada a 3.476 hogares en 14 provincias, registró que “el 92% de los ecuatorianos está muy pendiente de los acontecimientos que vive el país porque se ve afectado en su trabajo y seguridad”. El “76% de la población consultada considera urgente buscar la más pronta solución”. Para concretar el diálogo propuesto por el Presidente sugiere “suspender la vigencia del decreto 883” y de esa manera conjuntamente “con los sectores indígenas analizar las medidas más convenientes para el país, y muy especialmente para las clases que resultan más afectadas por las medidas”.
En ese mismo tenor se pronuncian alcaldes del país en un manifiesto público señalando que “es hora que la calma vuelva al Ecuador derogando el decreto 883 en todos sus contenidos como una muestra de sensibilidad ante las vidas que se han perdido, las agresiones entre hermanos, los detenidos y heridos y las incuantificables pérdidas económicas”.
Por su parte, la CONAIE sostiene en un comunicado público: “la jornada en el décimo día de movilización nacional ha sido conmovedora por la incansable voluntad de nuestra gente a luchar…sin embargo, el Estado y todo su aparataje ha demostrado tener la decisión de seguir matando indígenas y gente en las calles hasta derrotarnos en el dolor de ver perder a nuestros compañeros y hermanos de lucha”. La CONAIE considera que es su responsabilidad “destrabar la situación y evitar un baño de sangre de nuestro pueblo por la brutal represión a manos de la fuerza pública”. En otro acápite del documento señalan: “en este contexto no ha existido ninguna negociación sino se trata de orientar la política económica del país. Por eso realizamos los acercamientos para tratar la derogatoria del decreto 883, pero sostendremos las acciones de movilización a nivel nacional”.
Los resultados de este acercamiento fueron confirmados en un comunicado oficial de la Conferencia Episcopal Ecuatoriana, en calidad de mediadora, conjuntamente con el Sistema de Naciones Unidas del Ecuador en el que señalan: “Tras mantener contactos con el Gobierno y con las organizaciones del movimiento indígena, la primera reunión de diálogo está convocada para el día 13 de octubre a las 3 de la tarde en Quito”.
Luego de un tira y afloja parecía visualizarse una salida política a la crisis, sin embargo el régimen continúa sosteniendo una campaña de desinformación y propaganda. En la noche del sábado se produjo un “cacerolazo” doméstico convocado por sectores de manifestantes en contra de las medidas y este encontró una masiva respuesta ciudadana. No obstante, la versión de los medios de información señaló que el cacerolazo es “por la paz”, dando a entender un apoyo quiteño al gobierno.
En el trasfondo de la crisis existe un elemento decisivo. El gobierno está sintiendo la presión social por un lado, pero además siente la exigencia de un bloque de poder muy fuerte que le obliga a mantener las medidas económicas, entre ellas, el fin del subsidio a los combustibles ordenado por el FMI. Por tanto, resulta poco menos que imposible que el gobierno ceda en esa medida derogando el decreto 883, sencillamente porque pone en riesgo todo un paquete de acuerdos firmados con el FMI. En otras palabras, se deroga el decreto y se cae el paquetazo del Fondo Monetario Internacional. Y eso está lejos de permitirlo la derecha económica del país. El gobierno para sostener la situación no tiene más que oír la voz del pueblo.