El exsecretario jurídico de la Presidencia, Alexis Mera, una de las personas de mayor confianza del exmandatario Rafael Correa, fue detenido en Guayaquil junto a María de los Ángeles Duarte, exministra a cargo de las carteras de Obras Públicas y de Vivienda en la Administración anterior. Ambos fueron puestos a disposición de las autoridades por un presunto delito de concusión.
El nombre de Alexis Mera había sido mencionado por el caso Odebrecht, pero hasta este momento Mera no había sido implicado judicialmente. El arresto se produjo bajo el cargo de presunto delito de concusión, es decir, “la acción de exigir impuestos, multas o prestaciones arbitrarias que lleva a cabo un funcionario público en provecho propio”. La nota judicial señala que “ambos, según la Fiscalía, enfrentan una investigación por un presunto delito de concusión que, de acuerdo al Código Penal ecuatoriano, castiga con penas de tres a cinco años de cárcel a los funcionarios públicos que aprovechen su posición de poder para ordenar o exigir pagos o gratificaciones indebidas.
Un escueto comunicado fiscal mencionó que la detención forma parte de una nueva investigación “diferente a la denominada Arroz Verde” sobre aportes ilegales a la campaña electoral del 2014 de Alianza PAIS. Las contribuciones -según el expediente del caso- habrían sido hechas por la empresa brasilera Odebrecht, la china Sinohydro o la ecuatoriana Telconet e involucraban a altos funcionarios del Gobierno, incluidos los de los dos detenidos de este viernes. El nombre de Alexis Mera ya había trascendido previamente en el proceso judicial de Odebrecht que llevó al exvicepresidente Jorge Glas a prisión en 2017, con una condena de seis años por asociación ilícita.
La detención de Mera y Duarte está rodeada de confusiones y rectificaciones fiscales. A través de tres comunicados diferentes, emitidos (dos de los cuales fueron borrados de sus redes sociales), la Fiscalía General del Estado informó del asunto. A las 11:38 de ayer señaló que se trataba de una ‘retención’ por el caso de los presuntos aportes ilegales de campaña, caso que se conoce como Arroz Verde; luego, a las 11:45 hablaba de una ‘detención’ por el delito de concusión; y a las 12:27 indicó que era una ‘detención’ por concusión, pero “caso distinto a Arroz Verde…”.
El ex mandatario Rafael Correa reaccionó en su cuenta de Twitter:“¡Delito de concusión!. Recuerden ecuatorianos: la Fiscalía tendrá que probar que Alexis, María, o la misma Pamela y su asistente Laura, ‘abusando de sus cargos exigían’ contribuciones, sueldos, gratificaciones, etc. ¡Ah! Y que Odebrecht puso presidente. No lo olviden…”, advirtió el exmandatario en Bélgica. El movimiento Compromiso Social también manifestó su reacción. Mediante un comunicado tildó la actuación de la Fiscalía como una persecución “impulsada desde el Gobierno…”.
Este nuevo caso de detención y judicialización de ex funcionarios del resumen anterior se inscribe en una persistente campaña de persecución judicial a los militantes y colaboradores de Alianza PAIS y del ex presidente Rafael Correa. La historia continua.