Por Patricia Schuller
Las elecciones presidenciales, parlamentarias y de consejeros regionales (cores) de este domingo serán una suerte de examen de grado para los partidos tradicionales y para la instalación de una decisiva correlación de fuerzas al interior del Congreso si se piensa en lo que será la discusión y aprobación de proyectos.
La nueva ley de partidos políticos, que obliga a las colectividades a obtener un 3% de la votación en tres regiones contiguas o en ocho discontinuas, o bien lograr tres diputados electos en dos regiones distintas, será una instancia de evaluación para muchas colectividades. De hecho, los partidos que no alcancen esos mínimos, perderán su registro oficial.
Un total de 28 colectividades legalmente constituidas participarán en las elecciones parlamentarias. Siete de ellas corresponden a los denominados partidos tradicionales (UDI, RN, DC, PR, PPD, PS, PC) que no deberían tener dificultades para sortear esta norma transitoria de la nueva ley de partidos políticos.
Otros, como Amplitud, Revolución Democrática o Evópoli, han diseñado estrategias para evitar la desaparición. Junto con ellos, cerca de una veintena de colectividades esperarán ansiosos los resultados del domingo bajo la amenaza de la desaparición. Entre ellos, se encuentran Ciudadanos, y el MAS y la Izquierda Ciudadana. En la misma categoría entran partidos que hoy tienen candidato presidencial, como Partido Progresista, de Marco Enríquez; PAIS, de Alejandro Navarro y Unión Patriótica, de Eduardo Artés.
La Fuerza de la Mayoría
Los cuatro timoneles de La Fuerza de la Mayoría compiten por un cupo parlamentario: Álvaro Elizalde, del Partido Socialista (PS), postula al Senado por El Maule; Ernesto Velasco, del Partido Radical (PR), lo hace como diputado por La Serena; Gonzalo Navarrete, del Partido por la Democracia (PPD), por Lo Prado, y Guillermo Teillier, del Partido Comunista (PC), va a la reelección por el Distrito 13.
Algunos analistas han sostenido que la derrota de cabecillas del bloque podría debilitar fuertemente al bloque, por lo que los presidentes de las colectividades encaran un alto desafío, lo que está claro en sus organizaciones, por lo que pusieron grandes esfuerzos en esas candidaturas.
El PS es la colectividad que lleva la mayor cantidad de diputados a la reelección: 14 de 16, en la senatorial se asume casi transversalmente que hay incertidumbre sobre los resultados de las cuatro cartas socialistas: Camilo Escalona, Elizalde, Isabel Allende (Valparaíso) y José Miguel Insulza (Arica).
En el caso del PC, el partido apostó por uno de sus seis actuales diputados, Lautaro Carmona, para volver al Senado, donde no tienen representante desde la década de los 70’. En la Cámara Baja, los comunistas apuestan por subir de seis a ocho diputados, para mantener el 5% de representatividad en esa instancia.
El PPD lleva 12 postulantes al Senado y podría sacar hasta siete representantes. La colectividad apuesta por construir una amplia bancada de senatorial, en la que tendrán un rol protagónico Guido Girardi y Ricardo Lagos Weber.
La supremacía de la UDI
Los partidos de Chile Vamos esperan con expectación los resultados.
Actualmente la Unión Demócrata Independiente (UDI) detenta la mayor bancada de diputados (28). Y espera seguir siendo el partido con más representación parlamentaria del sector, con una expectativa de llegar a 34 diputados.
Renovación Nacional (RN) partió el periodo con 19 diputados y hoy cuenta con 14, cifra que podría crecer a 30, según los cálculos.
Evópoli solo tiene la representación de Felipe Kast y el PRI busca debutar en el Congreso.
Tomás Fuentes, cientista político y encargado electoral de RN, sostuvo este viernes en radio Cooperativa que Chile Vamos va a elegir “por lo menos 13 ó 12 senadores”, lo que consideró “un premio a un pacto en conjunto y no en la separación de pactos de la ex Concertación”.
Frente Amplio: tres partidos con riesgo de desaparecer
En la misma coalición tienen claridad que solo tres de las colectividades que la integran tienen opciones reales de cumplir con los requisitos legales.
Desde el mismo bloque han señalado que los partidos Igualdad, Liberal y Ecologista Verde no tienen las posibilidades de lograr los tres diputados que exige la normativa (3% de los sufragios en tres regiones contiguas). Ninguno de estos partidos está constituido en más de ocho regiones.
Varios analistas electorales sitúan entre 5 y 8 los parlamentarios que pudiera elegir el Frente Amplio, lo que significaría un avance, pero las áreas de riesgo no son menores en cuanto a no alcanzar esa cifra.
El desafío de la Democracia Cristiana
Para nadie es un misterio lo que se juega la Democracia Cristiana en estas elecciones.
Existe cierta incertidumbre respecto a cuál será el escenario electoral, especialmente por la decisión que tomó la mesa de competir en una lista parlamentaria, llamada Convergencia Democrática, junto a la Izquierda Cristiana y el MAS y separada del resto de los partidos que componen la Nueva Mayoría.
Según las proyecciones que se manejan en la DC, el resultado en las senatoriales no debería ser tan adverso dado que postulan cartas fuertes por lo que, a pesar a ir en una lista aparte, alcanzarían al menos cinco senadores.
Respecto a la Cámara Baja, al interior de la colectividad esperan que el partido logre obtener cerca de 16 nuevos diputados. Sería la bancada más pequeña del partido desde 1990 a la fecha.
Kenneth Bunker, doctor en Ciencias Políticas y director del Programa electoral de la Universidad Central, dijo este viernes en Cooperativa que “uno de los puntos más interesantes para mí, como cientista político, es observar qué pasa con la DC”.
“Nosotros estamos viendo que, de los 22 diputados que tiene (la DC), podría bajar a 17; pero eso es pasar de 22 de 120 (número actual), a 17 de 155. Es decir, en la DC podrían perder hasta 8,2 por ciento de su representación en el Congreso”, indicó.
Y añadió que “perder 8,2 por ciento un partido político tradicional como la DC, que está en el centro, que podría negociar con los dos lados, servir como bisagra, podría ser bastante dramático y, dependiendo de cuáles son los diputados y senadores de la DC que salen elegidos, podría cambiar la configuración de ese partido y entrar en una crisis no menor”.
En esto hay un punto no menor, y es que la DC está ante la situación de seguir bajando permanentemente en cada proceso electoral.
Fuente El Siglo